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Es mi alma amante
que te busca sin descanso
Es mi río turbulento
que indaga por tu remanso.
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Desbordado sin control alguno,
algunas cárcavas formé a mi paso.
Pero no doy tregua, ni respiro
y a la impaciencia no hago caso.
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Firme, excavo mi verdadero cauce,
enorme e invulnerable.
Que me lleve a ti en forma
permanente e inexorable.